jueves, 27 de diciembre de 2012

Navidades lejos de casa. Parte I

En primer lugar, Feliz Navidad a todos! A pesar de la considerable distancia y la falta de espíritu navideño por estas tierras, es inevitable tener algo de nostalgia por España y sobretodo por la familia y amigos. Así que, con este panorama por delante, lo mejor que se puede hacer es viajar con buena compañía.

Nuestro finde comenzó con la llegada de Lucía, becaria ICEX en Mumbai, y directas a Hauz Khas Village (barrio de moda en los últimos años en Delhi) a reunirnos con otros becarios en el mítico restaurante nepalí "El Yeti". Sespués de haber dormido apenas dos horas, nos fuimos para Amristar, en coche...error!! más de 12 horas de viaje por culpa de la niebla y las malas infraestructuras indias (en serio, esto lo tienen que cambiar si se plantean llegar a ser potencia económica).

A pesar de la pesadez del viaje, creo que la vista mereció la pena. Tanto de noche, como por la mañana al día siguiente, el Templo Dorado de los Sikhs impresiona. Otra vez más se me hace extraño que entre tanto caos, suciedad y ruido, se encuentre esta joya, a la que sólo se accede descalzo, después de  por un suelo de mármol helado, y los pies mojados con agua para "purificarnos" a la entrada....pero insisto, mereció la pena :)




Al día siguiente nos acercamos hasta la frontera con Pakistán. La ceremonia del cambio de guardia sobrecoge...en ambos lados se reúne muchísima gente gritando, cantando, movidos no se sabe si por un espíritu patriótico o festivo. El caso es que es otra escena digna de mencionar en esta aventura.

Y para terminar el viaje, Chandigarh, la única ciudad planificada de la India. Diseñada por Le Cobusier bajo  petición de Nehru, que decidió fundar una nueva capital para el Punjab después de que Lahore quedará para Pakistan tras la independencia.

La vuelta ha estado marcada por el frío, y por las revueltas sociales que ha causado la la violación de una estudiante en un autobús urbano hace dos semanas. Cuando llegué a India no pensaba que fuera un país inseguro, teniendo las debidas precauciones, pero últimamente las noticias no inspiran mucha confianza. Como muestra de cómo está respondiendo Delhi al caso, aquí va una de los carteles pidiendo la pena de muerte para los violadores..

Aun así, me tengo que despedir con energía positiva porque la próxima parada es Bangkok y las islas del sur de Tailandia, buen plan para despedir este 2012, no?

viernes, 7 de diciembre de 2012

El frío delhita

El frío ya ha llegado a Delhi y,  aunque no comparable a Soria (ni de lejos), creo que no venía preparada para esto...Y claro, con el frío llega también la Navidad y aquí, a falta de turrones, las tiendas más occidentales han empezado a decorarse, todo muy "Indian-style".
Aunque no se ve muy bien, sí, es decoración navideña: son  tres Papás Noeles con  sus respectivos caballo, camello y elefante. Lo encontramos en una tienda de Khan Market, en la zona diplomática de Delhi
Los días van pasando, y cada vez noto que "entiendo" (en sentido figurado, por favor) más a esta gente; si los primeros días que salía a correr por las mañanas me moría de miedo, ahora sólo lo hago de frío...cada vez me resultan más familiares los perros callejeros, los indios que duermen y pululan por las calles, alrededor de las hogueras o los drivers, o los tenderos madrugadores que ponen sus puestos...aunque no todo es pobreza, reconozco que siento admiración por las personas mayores que me encuentro en el parque al que voy. A las 7 de la mañana ellos se dedican a hacer yoga y repiten posturas que para mí son de momento impensables (estoy empezando, hay que darse tiempo...).

Como contraste a las bajadas de temperaturas, siempre queda el calor de los días en Jaipur. Pasamos el fin de semana en esta ciudad del Rajasthan, un estado del noreste de Delhi, quizás de los más grandes de la India y uno de los más bonitos (asumo mi error, porque hacer comparaciones en cuanto a la belleza de los lugares de India es de ingenuos...). Todos los lugares que visitamos, el Palacio de los vientos -Hawa Mahal-, el palacio-hotel Taj Ramgbar, el fuerte de los tigres -Nagarah-, donde vimose atardecer, o el Fuerte de Ambert, son maravillosos, aunque como ocurre en la mayor parte de las ocasiones, falta conservación...si todo esto estuviera cuidado....dejaría de ser la India, está claro.

Palacio de los Vientos, una de las joyas de Jaipur

Vista desde una de las ventanas interiores al patio del Hawa Mahal, o Palacio de los vientos

Vista desde el interior del Ambert Fort, 8 km al norte de Jaipur

Fauna que encontramos: monos, cabras, jabalíes...de todo!!

Un dibujo de Ganesha en una de las habitaciones del Ambert Fort, una pena, pero hay que reconocer que está muy logrado...


PD: no me puedo despedir sin recomendaros un libro que me está enseñando a entender el país y sus gentes, se titula Being Indian, de Pavan K Varma. En mi segundo post puse una cita, pero según lo leo, descubro miles de ellas, todas válidas para definir esta cultura indescriptible. Sin duda, está totalmente recomendado para todo aquel que sienta curiosidad por este subcontinente.