Ya hace mucho que no actualizaba ésto...y cómo pasa el tiempo! Parece mentira pero ya casi ha acabado Junio, por excelencia
el mes de comienzo del verano, el sol, las vacaciones….y nunca antes lo habría dicho,
pero quiero que termine ya! El calor que se lleva en Delhi no está hecho para
mí (bueno, ni para nadie). A pesar de las lluvias que sólo hubo la semana
pasada, (el monzón se ha adelantado casi un mes y está arrasando el Norte de India y Nepal http://www.rtve.es/noticias/20130621/lluvias-monzonicas-causan-casi-200-muertos-nepal-india-ultima-semana/694121.shtml
D), se han vuelto a superar los
40 grados…y eso agota.
Pero no todo son quejas…al contrario. Para empezar el mes de
mayo como se merecía vinieron unas amigas desde Madrid, Sara y Maricruz, compañeras de la facultad de farmacia, y aprovechando su visita planificamos un viaje
las Islas Andaman, un paraíso (en serio, un auténtica joya de la naturaleza!)
en mitad del Golfo de Bengala, protegido de momento del turismo de masas al que
está acostumbrado el “Triángulo Dorado”.
Las islas Andamán son un lugar para perderse, donde el preservado encanto salvaje,
sus playas, sus reservas de coral y la multitud de actividades disponibles hacen
idílico cualquier plan de vacaciones.
Volamos a Port Blair, antigua colonia británica conocida por
ser la cárcel de los que luchaban por la independencia india, desde Calcuta (no
hay vuelos directos desde Delhi, todos pasan por Chennai, al Sur, o Calcuta).
Como el turismo está restringido a sólo algunas de las islas del archipiélago,
nada más llegar al aeropuerto tuvimos que registrarnos y conseguir un permiso,
el RAP (Restrited Area Permit), para poder reservar hotel o el ferry que
conecta con el resto de islas. En teoría, forma parte de la política de conservación
de la biodiversidad y riqueza étnica (Andaman cuenta con 12 tribus aborígenes)
por parte del gobierno Indio, política de la que me río yo al leer
artículos sobre los famosos safaris
humanos de las islas http://www.survival.es/noticias/9244 y que es reflejo una vez más de la
incoherencia india de la que tanto nos quejamos.
En Port Blair tan sólo pasamos unas horas el último día. Allí
los británicos construyeron un penal (Celullar Jail) en el que encarcelaban a
los activistas políticos envueltos en la Rebelión de la India de 1857, y a los
que sometían a verdaderas atrocidades, de ahí su nombre Kālā Pāani (Aguas
Negras) y el nombre de la película hindi de Priyadarshan , rodada en la cárcel
en 1996 (http://en.wikipedia.org/wiki/Kala_Pani_(1996_film).
Merece la pena entrar y conocer las condiciones que muchos prisioneros
soportaron, en muchas ocasiones las torturas y castigos a los que se veían
sometidos me recordaban, salvando las distancias, a los campos de concentración
nazis.
Pero debemos volver al hilo de este post, a pesar de lo que
guarda la capital, el archipiélago de Andaman esconde verdaderos tesoros de la
naturaleza en sus islas. La más turística de ellas, Havelock, está a 40
kilómetros al noreste de Port Blair, y es la que cuenta con mayor oferta e
infraestructuras turísticas con diferencia. Nosotras llegamos en ferry, después de dos
horas, aunque hay otras opciones, ferrys de compañías privadas mucho más
rápidos o incluso avionetas. Entre sus maravillas, la playa Radhnagar (la
famosa número siete, porque aquí todo se nombra con números, para qué cambiar…)
de arena blanca y aguas cristalinas, es un auténtico paraíso. Es famosa porque
puedes ver elefantes en el mar, y los atardeceres son los mejores de Havelock
con diferencia. La playa nº 5, es una
playa paradisiaca de libro, donde te puedes podrías perder al estilo Robinson
Crusoe, y disfrutar de poder estar solo, en un lugar perdido en medio del Golfo
de Bengala.
Gracias a este viaje hice mi primera inmersión, y he descubierto que me APASIONA el submarinismo. La sensación de estar dentro del agua, en contacto directo con la naturaleza y en lugares únicos es un privilegio. Tanto es así, que hace unos días viajamos a Sri Lanka y nos sacamos el título de Open Water Divers, la primera certificación en buceo recreativo.
En Sri Lanka nos dedicamos casi en exclusiva al buceo, las
mejores inmersiones fueron en las aguas de Pigeon Island, una reserva natural
en Trincomalee, una playa en la costa Noreste de Sri Lanka (la mayoría de las
escuelas de buceo están en el sur, pero el monzón estaba en esa parte y nos
hizo cambiar de ruta). Aquí las aguas son casi transparentes, los corales son
espectaculares y pudimos ver miles de especies, incluidos tiburones, sin
necesidad de sumergirnos más de 3 metros, y sólo con el snorkel. En este caso
no llevamos cámara submarina, pero ésta es una muestra de lo que puede ver por
allí, son fotos de www.divingsrilanka.com,
la página web dePoseidon Diving Station, con quien nos sacamos el título.
Totalmente recomendado! Nos hicieron un curso personalizado para los 3 días, con
dos instructores para los 4.
Esto es todo de momento, sé que éste tipo de post hace creer que este año está siendo increíble (que lo está siendo) pero es que me niego a escribir en momentos de bajón, y últimamente los hay y muy frecuentes. Yo personalmente llevo muy mal el calor y los 8 meses peleando con los indios (la maid que falta 3 semanas sin avisar, el del agua , el del puesto de la calle que te tima 10 rupias sistemáticamente, los de Airtel, que encima de timarnos nos cortan el ADSL...) queman y agotan. India no es un país fácil ni cómodo, pero prefiero centrarme en la parte positiva, porque la alternativa sería contar los días que nos quedan para volver, y no me voy a poner a hacerlo.
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